El Museo del Ejército de Toledo surgió de la fusión de varios Museos Militares creados en los siglos XIX y XX. Su núcleo fundacional está constituido por los museos de Artillerías e Ingenieros. Actualmente, su sede se encuentra ubicada en el Alcázar de Toledo.
El museo habla de la historia y el progreso de diferentes campos tan importantes en nuestro país como son el social, institucional y cultural que se distribuyen a lo largo de 20 salas de exposición permanente y se organizan por salas históricas, temáticas y otra con restos arqueológicos del propio Alcázar.
Caminar por el Museo del Ejército es encontrarse con numerosas armas de fuego, artillería, banderas, uniformes, miniaturas, maquetas… pero también una amplia variedad de espadas que han formado parte de la historia de nuestro país. A continuación, os enseñamos algunas de las que seguro habéis oído hablar.
La Espada de Pitones
Se trata de una espada con guarnición formada por gavilanes vueltos en direcciones opuestas, patillas al recazo y pitones en ángulo recto. Este elemento que sirve para identificarla son dos piezas metálicas que surgen de la guarda en ángulo recto para dar protección al dorso de la mano que porta la espada.
Cuenta con un puño alambrado fabricado con madera y dos virolas con pomo setiforme. Todo ello aparece decorado con elementos vegetales que presentan restos de dorados.
La espada de pitones tiene una hoja larga y ancha y un canal ancho donde aparece grabada la inscripción: LUPUS AGUADO/ IESUS MARIA. La primera mención hace referencia al nombre del forjador de la hoja, Lope Aguada y la segunda se refiere a una inscripción de carácter religioso profiláctico, que hace referencia a otras hojas del mismo autor.
Espada Jineta de Boabdil “El chico”
La espada jineta ubicada en el Museo del Ejército de Toledo forman parte del último rey de Granada. Se considera una de las mejores y más ricos ejemplares de las escasas espadas cortesanas nazarís, denominadas como “jinetas”.
Su empuñadura está decorada a base de esmaltes de posible influencia bizantina frecuentes en la producción andalusí. Los brazos del arriaz están curvados hasta abrazar los filos de la hoja y rematados con dos figuras zoomorfas.
El pomo recuerda a las cúpulas bulbosas de origen bizantino y el cuerpo central del puño está fabricado con marfil.
La vaina es de madera forjada con cuero repujado, cordobán y decorado con hilo de oro. Son varias las inscripciones que aparecen en esta espada y todas se corresponden a suras del Corán.
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